El equipo azulgrana salvó su primer 'match ball' en Madrid. Una derrota en el Palacio de los Deportes significaba decir adiós al título. Pero el Barça se repuso del humillante batacazo sufrido el lunes en este mismo escenario (85-59). Y de qué manera. Su imagen no tuvo nada que ver con la de apenas 48 horas antes. Los de Xavi Pascual cuajaron un partido casi perfecto. Siempre fueron por delante en el electrónico y no dieron opciones a su rival.
El Barça empieza mandando (15-17)
Los azulgranas dominaron desde el principio. Más sólido en defensa, y efectivo en ataque, el Barça llegó al término del primer cuarto con una ligera ventaja de dos puntos (15-17). Buena parte del mérito estuvo en la solvencia de Lorbek, que acabó este período con 9 puntos, y que a la postre se coronó como máximo anotador del duelo con 24.
El esloveno fue el más destacado, pero en general todo el equipo rindió a un nivel excelente. Así lo demuestran, por ejemplo, los 16 puntos y seis rebotes de un Wallace entonadísimo. O los 13 puntos y 8 rebotes de Mickeal. O los 15 de Huertas, los 12 de Navarro...
Buen partido hasta el descanso (34-39)
El Madrid se vio superado por su rival. Nunca se sintió cómodo. Y en ello tuvo mucho que ver Wallace, máximo anotador en la media parte con 14 puntos en su haber. El norteamericano destacó especialmente en los triples, con un balance de tres de tres desde los 6,75 metros. Gracias a ellos, el Barça fue ampliando poco a poco su renta, hasta alcanzar los seis puntos de iferencia (25-31). Al descanso llegó cinco arriba (34-39)
Siete arriba en el tercer cuarto (55-62)
Y alrededor de esa renta se mantuvo durante el tercer cuarto. El Barça continuó dominando. Un triple de Mickeal amplió la distancia hasta los nueve puntos, culminando un parcial de 0-7 (44-53). El Barça llegó al último cuarto con una renta a priori tranquilizadora: 55-62.
Emoción hasta el final (75-81)
Los azulgranas no se arrugaron en el tramo decisivo. Otro triple de Mickeal puso al Barça 13 puntos por delante, máxima ventaja en todo el duelo (60-73). Lorbek no estuvo fino con los tiros libres, pero lo compensó resarciéndose a base de triples (68-79).
Pocos podían pensar que el Barça acabaría sufriendo. Pero así fue. Un triple de Mirotic a 1:11 del final puso un inquietante 74-79 en el electrónico. Pero a los azulgranas no les tembló el pulso. Y así, sin miedo, lograron forzar el quinto y, ahora sí, definitivo encuentro de la final de la Liga Endesa. La cita será en el Palau Blaugrana, el sábado a las 18:00 h. Baloncesto en estado puro.
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